19 de noviembre de 2018

19 de noviembre de 2018 - , , , Sin comentarios

Guía práctica: Funchal en 2 días

Si bien es cierto que no es una ciudad demasiado monumental, al menos es necesario reservar dos días para descubrir tranquilamente la capital de Madeira y sus alrededores. Un lugar que eligieron como destino de "desconexión" grandes celebridades como la emperatriz Sissí o Winston Churchill, ¿descubrimos por qué?

Día 1

Un buen punto de partida es la Oficina de Turismo situada en la avenida Arriaga, donde os pueden proporcionar información sobre la ciudad. Considerada el eje principal de Funchal, se puede empezar la ruta por uno de sus extremos, el Parque de Santa Caterina. Una extensa zona ajardinada para pasear, descansar leyendo un buen libro u observar los patos y cisnes en el lago central. Su privilegiada ubicación en lo alto de una colina nos permite disfrutar de unas bonitas vistas de Funchal y su bahía.


Llaman la atención dos antiguas máquinas que se encuentran en el parque y que suponemos, porque no tienen ningún tipo de identificación, que son una antigua apisonadora y una prensadora de uvas.


Recorred la avenida Arriaga y deteneos frente al Jardín Municipal. Si tenéis la suerte de hacer coincidir vuestra estancia con la época pre-navideña (mes de diciembre), es uno de los escenarios que se decora con más encanto, como si fuera una aldea, ideal para jugar los más pequeños. Destacan las casitas de los elfos, el trineo de Papá Noel y un tren de madera. Este terreno pertenecía al convento de San Francisco, del que todavía se conserva la Piedra de Armas.

Si sois amantes del vino, quizás os interese descubrir la bodega más antigua de Madeira, Adega de São Francisco o de la familia Blandy, donde se ofrecen catas de vino y visitas guiadas para conocer su proceso de elaboración.

Merece la pena acercarse hasta el Forte de São Lourenço. Esta Fortaleza-Palacio acoge el Museo Militar y la residencia oficial del Representante de la República en Madeira.

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Os recomendamos la visita gratuita de las dependencias del Palacio. Tened en cuenta que se realiza en un horario muy reducido, en grupos pequeños (máximo 20 personas), no siendo necesaria una reserva previa.

La visita libre, es en realidad dirigida por un funcionario del Palacio, que os acompañará durante todo el recorrido. En la entrada os proporcionan una carpetilla con la descripción de las salas que se van a cruzar y que hay que devolver al terminar la visita. Está prohibido hacer fotos en interiores.

Palácio de São Lourenço
  • Horario: L 14:30, M-X 10:00, J 10:00 y 14:30, V 15:00
  • Entrada gratuita  

    En el cruce de la avenida Arriaga con la avenida Zarco os espera una estatua conmemorativa del descubridor de la isla. A sus espaldas, el Banco de Portugal, que destaca por su arquitectura tradicional.


    En el siguiente bloque de edificios veréis una puerta abierta (en días laborables) que tenéis que cruzar, la del antiguo hospital de Santa Isabel, que también fue Casa de la Misericordia y desde el último cuarto del s.XX alberga la Asamblea Legislativa de Madeira. Es sorprendente el fresco de Guilherme Camarinha, un mural modernista que se ubica en el rellano de la escalera que da acceso a la sala noble.


    Callejead por el centro hasta llegar a la Praça do Municipio, donde se encuentra el Palacio del Conde de Carvalhal, actual ayuntamiento.


    Se puede entrar libremente para observar en su patio la escultura de mármol Leda y el Cisne, que en su día estuvo ubicada en el Mercado dos Lavradores. Se ofrecen visitas guiadas al ayuntamiento todos los días laborables.


    En una de las esquinas de la plaza está la Iglesia del Colegio. ¿A qué esperáis a entrar para descubrir su interior?



    Continuando por la Rua dos Ferreiros, encontraréis una peculiar librería, la librería Esperança.



    Como probablemente sea ya la hora de comer, acercaos a los aledaños del Mercado dos Lavradores. Os recomendamos el restaurante A Bica.

    Los típicos azulejos blancos y azules de Portugal nos reciben a la entrada del Mercado dos Lavradores, murales que representan distintos vendedores y el mercado de principios del s.XX.


    Tradicional y turístico a partes iguales, llaman la atención los coloridos puestos con frutas y verduras de formas, colores y texturas a las que no estamos acostumbrados. ¡No os vayáis sin probar la gran variedad de híbridos de maracuyá que os ofrezcan los vendedores!

    Si preferís disfrutar del bullicio de la lonja de pescado sin estar metidos en medio del fregao, subid a la primera planta. Desde arriba se puede contemplar cómo se negocia el mejor precio para cada pieza y cómo se limpia  el feo pez sable, el más típico de la isla.




    ¿O queréis un regalo original y que no ocupe mucho en la maleta? Podéis comprar bulbos y semillas de flores exóticas.

    Mercado dos Lavradores
    • Horario: L-V 7:00-20:00, S 7:00-14:00
    • Entrada gratuita  

      Adentraros en la Zona Velha por la Rua Santa Maria. Para traer de nuevo la vida a esta zona se apostó por el street art, y es que en esta estrecha y pintoresca calle, cada puerta está pintada como si fuera una obra de arte.



      Retroceded para volver a la zona de la catedral. Los más golosos podéis hacer una parada en la Fábrica Santo Antonio. Dicen que son los mejores bolos de mel y las mejores galletas artesanas de la isla.

      Si no lo habéis hecho todavía, aprovechad para entrar en la Catedral. ¿Os habéis fijado en el artesonado de su techo?



      Catedral
      • Horario: L-D 9:00-12:15, 16:00-18:00
      • Entrada gratuita  

      Si estáis en Funchal durante el mes de diciembre podréis disfrutar de belenes, inspirados en las tradiciones de Madeira, a tamaño real o en miniatura ubicados en las principales plazas y avenidas de la ciudad.



      Tampoco os podéis perder el mercadillo navideño de la avenida Arriaga, donde seguro que os sorprende algún grupo numeroso ataviado con trajes típicos madeirenses practicando bailes tradicionales.


      Si estáis cansados del ajetreo de todo el día, nada mejor que relajarse en la piscina del hotel.


      Para terminar el día, ¿os apetece daros un capricho? Si tenéis algo que celebrar, reservad para cenar en el restaurante del Hotel The Vine, ¿y por qué no tomar una copa en su azotea?

      Día 2

      Comenzad la mañana recorriendo el paseo marítimo hasta el Parque del Almirante Reis, donde se encuentra el teleférico que conduce a Monte, una pequeña población ubicada en lo alto de la ladera por encima de Funchal.

      Contemplar Funchal desde las alturas es casi una obligación. El funicular se desplaza lentamente, lo que permite disfrutar de unas fabulosas panorámicas, en un trayecto que dura poco más de quince minutos.


      Se ve como el entorno evoluciona y la acumulación de viviendas deja paso a verdes barrancos que contrastan con el azul del océano en el horizonte.

      Teleférico do Funchal
      • Horario: L-D 9:00-17:45 (sólo cerrado 25 diciembre)
      • Precio:
        • Ida: 11€
        • Ida y vuelta: 16€

        Justo a la salida del teleférico está el Jardín Tropical de Monte Palace. Os sorprenderá el contenido multicultural de este jardín privado gestionado por la fundación José Berardo. Podéis observar desde una exposición de esculturas de arte contemporáneo de Zimbabwe hasta jardines con decoración oriental pasando por las escenas más importantes de la historia de Portugal narradas en azulejos. Sin olvidarnos de la infinidad de plantas endémicas de otros países. En el precio de la entrada viene incluida la degustación en su cafetería de un chupito de un vino seco o dulce de Madeira.



        Jardim Tropical Monte Palace
        • Horario: 
          • Jardín: L-D 9:30-18:00
          • Museo: L-D 10:00-16:30
        • Precio: 12,5€  

          Otro de los puntos de interés en Monte es la iglesia de Nossa Senhora, donde se encuentra el sarcófago de Carlos I, último emperador de Austria.


          Y aunque os parezca una turistada, tenéis que descargar adrenalina con los "carros de cestos". Estos cestos de mimbre y madera con capacidad de hasta tres personas son guiados por bajadas con bastante inclinación por dos carreiros ataviados de blanco y con sombrero de paja. Controlan el carro utilizando sus pies como frenos. ¡Evidentemente, sus botas están reforzadas con una gruesa suela de goma!


          Las calles por las que circulan no están cortadas al tráfico, pero no os preocupéis, durante toda la bajada tienen personas ubicadas en los cruces para que no se produzca ningún accidente. Está todo muy bien organizado, al final del trayecto espera una camioneta en la que suben los cestos y coches que vuelven a llevar a los carreiros hasta el punto de partida, las escaleras de la iglesia de Monte.

          Desde allí se puede bajar perfectamente al centro andando, aunque es habitual que haya taxis esperando, en poco más de media hora estáis en el Forte de São Tiago, si bien es cierto que en el primer tramo la inclinación es muy pronunciada y no es lo más recomendable para personas que sufren de las rodillas. 

          El Forte de São Tiago fue un su día un elemento defensivo frente a los piratas, pintado de un llamativo color amarillo, alberga una exposición permanente de arte contemporáneo.


          Probablemente ya sea la hora de comer, acercaos a la Rua de Santa Maria, una calle muy animada repleta de restaurantes.


          Nuestra recomendación: la Taberna Madeira, apartado en una calle perpendicular a ésta.

          Aparte de la decoración en las puertas de la Rua de Santa Maria, los artistas locales también han rejuvenecido los edificios de este barrio pintando coloridos murales sobre las paredes. Os invitamos a perderos por toda la zona velha para descubrir nuevas obras de arte... 


          Para completar un día redondo, se puede optar por realizar un paseo en barco para avistar delfines y cetáceos. Revisad bien el horario de estas actividades según sea invierno o verano.

          Otra posibilidad es descansar y disfrutar de la maravillosa piscina del hotel.

          Como habéis podido comprobar, Funchal ofrece muchas y variadas actividades, dependiendo de la época del año. ¿Os dejáis conquistar por la capital de Madeira?

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